A veces la caricia
O el certero golpe
Mientras decido,
No poner la otra mejilla.
Elación, amor, odio
En el amargo de su saliva
En la dulzura que emana
La cerrada curva
De su cadera,
Estrecha carretera
Para mi breve paso.
A veces nos miramos
Nos reímos
Como dos adolescentes
Cercanos
Ausentes
Birlando juntos
Un instante,
Sólo un instante
Del eterno presente.
Frágil, me enamora
La sutileza
Con que emerge
Y sin más
Y sin aviso
Con un tenue soplido
Mi ave de sueños
Derriba del nido.
Y la compro
Y me vende…
Arduo trueque, en la conquista
Permite que bese sus labios
Ceguera de amores perros
Pero… luego ella,
Ella me los quita.
Rita Mercedes Chio