domingo, 31 de julio de 2016

Y Frida decía...



“Cada (tic-tac) es un segundo de la vida que pasa, huye, y no se repite. Y hay en ella tanta intensidad, tanto interés, que el problema es sólo saberla vivir. Que cada uno resuelva como pueda”.


“Pies, ¿para qué los quiero si tengo alas pa’ volar?”



“Si yo pudiera darte una cosa en la vida, me gustaría darte la capacidad de verte a ti mismo a través de mis ojos. Sólo entonces te darás cuenta de lo especial que eres para mí”.



“Hay algunos que nacen con estrella y otros estrellados, y aunque tú no lo quieras creer, yo soy de las estrelladísimas…”

“México está como siempre, desorganizado y dado al diablo, sólo le queda la inmensa belleza de la tierra y de los indios”.

“Donde no puedas amar, no te demores”.



“¿Se pueden inventar verbos? Quiero decirte uno: Yo te cielo, así mis alas se extienden enormes para amarte sin medida”.

“Quise ahogar mis penas en licor, pero las condenadas aprendieron a nadar”.

“Aunque haya dicho “te quiero” a muchos y haya tenido citas y besado a otros, en el fondo sólo te he amado a ti…”

“Y tú bien sabes que el atractivo sexual en las mujeres se acaba voladamente, y después no les queda más lo que tengan en su cabezota para poderse defender en esta cochina vida del carajo”.

“Amurallar el propio sufrimiento es arriesgarte a que te devore desde el interior”.

“Yo solía pensar que era la persona más extraña en el mundo, pero luego pensé, hay mucha gente así en el mundo, tiene que haber alguien como yo, que se sienta bizarra y dañada de la misma forma en que yo me siento. Me la imagino, e imagino que ella también debe estar por ahí pensando en mí. Bueno, yo espero que si tú estás por ahí y lees esto sepas que, sí, es verdad, yo estoy aquí, soy tan extraña como tú”.



“Como siempre, cuando me alejo de ti, me llevo en las entrañas tu mundo y tu vida, y de eso es de lo que no puedo recuperarme”.

“Quizá esperen oír de mí lamentos de ‘lo mucho que se sufre’ viviendo con un hombre como Diego. Pero yo no creo que las márgenes de un río sufran por dejarlo correr”.



“Doctor si me deja tomar este tequila le prometo no beber en mi funeral”.

FOTO EDICIONES








A mi hija


Dulce paloma,
En busca del cielo
Almendra fragante
El pequeño instante
En que levantas vuelo.

Te alejas infecta
De amores y sueños
En la orla diminuta
De la abierta fruta
Que provoca celos

Mi dulce paloma
Organza y mujer
Hechizo de luna
Sobre aquella cuna
Que te vio nacer.

Mejillas cárdenas
Juguetes rotos
Crayón partido
Lavandas y lirios
En la vieja foto.

Pálida alondra
Mi niña creciendo
Breteles de seda
Encajes y penas
Que irán floreciendo.


 Rita Mercedes Chio
(Derechos reservados)