Y dime tú, qué hago
cuando florezca el cerezo
cuando la lluvia trasmute
el recuerdo de algún beso
y se apague lento
el candil de tus ojos
y tu espalda se aleje
por la mismas flores
que ciego de amor, recojo.
Y dime que tú, qué digo
cuando la luna se encienda
rota y quebrada,
de tanto llanto, de tanta pena
ansiosa mariposa de la noche
sobre aguas tan frías
en mi cuerpo de arena.
Y dime tú,
gaviota pasajera
cual es el ancla que no te he dado
tu fruta fresca, aun merodea
en la azul noche, de los pecados.
Y dime tu, pequeño
amor
qué haré, cuando no vuelvas…
Como un muelle abandonado,
como una barca sin sus velas,
naufragar en el destino,
o morir con la marea?